En las últimas décadas ha aumentado sostenidamente la práctica del deporte competitivo en los niños y adolescentes. Se ha incrementado el tiempo y la intensidad de la actividad física. Esto ha traído aparejado un aumento en la incidencia de lesiones agudas y subagudas del aparato locomotor relacionadas al deporte en los niños y adolescentes.
El aparato locomotor en crecimiento presenta condiciones estructurales y funcionales muy particulares que hacen que el tipo de lesiones difieran sustancialmente a las que se presentan en el adulto. Las más importantes de ellas son:
- Presencia cartílago de crecimiento.
- Epífisis y apófisis cartilaginosas.
- Unión tendón hueso con interfase cartilaginosa.
- Mayor elasticidad de ligamentos y tendones.
- Masa muscular variable en elasticidad y fuerza según la edad.
- Proporciones corporales variables.
De acuerdo a la elasticidad de músculos, tendones y ligamentos, junto a la fragilidad relativa que poseen sus estructuras cartilaginosas se determinan ciertos patrones particulares de lesión y éstos cambian de acuerdo a la edad del niño. Por ejemplo, las lesiones ligamentosas y musculares son muy raras en los niños pequeños, no así las lesiones cartilaginosas. Con frecuencia los cartílagos de crecimiento de los huesos largos y las estructuras cartilaginosas de los núcleos secundarios de osificación y de las apófisis sufren las consecuencias de lesiones agudas o de sobrecarga generadas en el deporte.
A medida que el aparto locomotor va madurando, se incrementa la envergadura y la fuerza muscular, los huesos se van haciendo cada vez más rígidos y las zonas de crecimiento cartilaginosas se van cerrando progresivamente. Sin embargo, hasta bien avanzada la madurez esquelética, persisten zonas de mayor fragilidad, especialmente en relación a las estructuras cartilaginosas. Estas son más vulnerables a las demandas mecánicas de tracción y de compresión.
Según la forma de presentación, las lesiones deportivas pueden ser agudas o subagudas. Las primeras se producen por una carga aguda de alta intensidad que provoca la falla y las segundas corresponden a una lesión secundaria a un micro trauma repetido, por lo que también se conocen como lesiones de sobrecarga.
Lesiones agudas
Entre las lesiones agudas se encuentran las fracturas y las lesiones traumáticas de partes blandas que se asocian a cualquier trauma.
Fracturas de stress
La carga submáxima repetitiva afecta al hueso produciendo las llamadas fracturas de stress. Son relativamente poco frecuentes en el niño y suelen representar problemas de diagnóstico diferencial. Su frecuencia aumenta a medida que el niño se acerca a los 18 años de edad y se ubican de preferencia en la extremidad inferior, pero puede afectarse cualquier hueso sometido a carga repetitiva, según el deporte practicado (23). Es característica la ubicación en la tibia proximal y en los metatarsianos en los corredores de largas distancias. La causa de consulta es el dolor de larga evolución.
Para su diagnóstico es esencial una buena historia clínica que registre el tipo y el tiempo de la actividad física practicada. Las manifestaciones en la radiología simple pueden simular una lesión tumoral o infecciosa y para el diagnóstico diferencial son de gran utilidad la cintigrafía ósea y especialmente la resonancia magnética. La rápida respuesta sintomática que sigue al reposo o restricción de la actividad física específica, contribuyen al diagnóstico. El pronóstico suele ser bueno y la consolidación se produce después de un tiempo de reposo.
Las lesiones del aparato locomotor infantil relacionadas a la actividad física pueden presentarse de forma aguda o subaguda. Las primeras son precedidas por un gesto deportivo o un trauma identificable, provocando dolor e impotencia funcional que obligan a una consulta precoz en un servicio de urgencia, requiriéndose rápidamente la atención del especialista.
En el caso de las lesiones subagudas, ellas pueden dar síntomas por mucho tiempo antes de llegar a ser diagnosticadas y tratadas en forma adecuada. El dolor esquelético que aparece después de la práctica deportiva debe alertar al médico no especialista y hay que considerar la existencia de una lesión específica de sobrecarga. Su derivación oportuna al traumatólogo infantil permitirá su diagnóstico y manejo adecuado sin comprometer en exceso la actividad deportiva de los niños afectados.
Padecimientos
El Dr. Luis M Ramírez B atiende los siguientes padecimientos

Deformidades de extremidades

Displasia de Cadera

Escoliosis

Fracturas y Luxaciones

Lesiones del niño y Adolescente Deportista

Parálisis Cerebral Infantil (Espasticidad)

Pie Equino (PEVAC)

Pie Plano y Alteraciones de la Marcha
