Estudios científicos llevados a cabo por Yong-Seok Jee, de la Universidad Hanseo, avalan el efecto perjudicial del uso excesivo de los tacones. Más de una mujer cuando lea esta afirmación puede decir ¿y para qué gastan tiempo y dinero en estudios cuando habría sido más fácil preguntármelo a mi después de una fiesta de Nochevieja?. Efectivamente ya solo de pensarlo nos ponemos en situación y nos duelen los pies. Es cierto, somos como Santo Tomás, y necesitamos de estudios científicos que corroboren nuestras sospechas.
Ya son muchos los expertos que han alertado sobre lo perjudicial que resulta el uso habitual de tacones altos que excedan los 3 cm de altura pero ya se sabe, mientras no viene el dolor, no viene el lamento.
El equipo de estudio del Dr. Jee vio que a pesar de producirse inicialmente un fortalecimiento de los músculos alrededor del tobillo, después de tres años los zapatos provocaron la dominancia de algunos músculos aumentando el riesgo de esguinces.
El equipo de estudio trabajó con 40 mujeres profesionales que usaban tacones de 10 cm o más altos por lo menos tres veces a la semana. Midieron regularmente la fuerza del tobillo de las mujeres, y encontraron que dos de los cuatro músculos principales comenzaron a hacerse dominantes después de entre uno y tres años de uso regular.
“La triada perfecta: el peso adelante, el zapato angosto y músculos más cortos.
“Como los tacones altos están de moda y en ocasiones se requieren para determinadas profesiones, muchas mujeres no son conscientes de que su uso regular puede debilitar el equilibrio y con el tiempo, producirse accidentes tales como caídas y esguinces de tobillo graves “, dijo Yong-Seok Jee.
Neil J. Cronin, profesor de biomecánica de la Universidad de Griffith (Queensland), comprobó que los músculos de la pantorrilla y los peróneos de las mujeres que usan calzado elevado son menos eficientes, lo que las hace susceptibles a esguinces y luxaciones.
“Pies deformes, dolor de espalda y patrones de caminar poco saludables pueden ser el resultado del uso de tacones” añadió Jee, por lo que es importante que las mujeres adopten “medidas preventivas”.
“Las estadísticas demuestran que las mujeres padecen hasta cuatro veces más problemas en los pies que los hombres”
Y entonces, ¿qué podemos hacer si pese a todo queremos o debemos usar tacones?. El uso permanente o frecuente de tacones altos se puede comparar con una actividad deportiva. De ahí que requiera de una fase de entrenamiento, de calentamiento y de enfriamiento.
Recomendaciones
Aquí resumimos una serie de pautas a tener en cuenta para no tener que cambiar de vestuario ni de puesto de trabajo:
- Limitar el uso de tacones.
- Realizar ejercicio de fortalecimiento de los tobillos:
- Caminar sobre los talones. 4 series de 2 minutos cada una.
- Andar de puntillas. 4 series de 2 minutos cada una.
- Zancada corta elevando rodilla. Coordinando bien con el movimiento de brazos, llevando el codo atrás, elevando una solo pierna. Después la otra. 2 series 1 minuto cada una.
- Saltos cortos. Corriendo de puntera, sin flexionar la rodilla, dar saltos cortos impulsándote con el tobillo, tratando de subir más que de avanzar. 3 series 1 minuto cada una.
- Correr “con los brazos”. Trata de correr de puntillas sin apenas flexionar las rodillas, llevando los pies hacia delante y tirando mucho de los brazos hacia atrás. 3 series 3 minutos cada una.
- Reducir la altura de los tacones.
- Usar tacones de base más ancha que la usada actualmente por la persona.
- Fortalezca los abdominales y los erectores del tronco.
- Mejore las posturas.
- Mantenga el peso adecuado.
- Cambie frecuentemente de zapatos, intercalando diferentes alturas de tacón.
- Suspenda el uso o disminuya la altura en casos de dolor permanente o frecuente en tobillos, rodillas, cadera o espalda.
- Utilice zapatos cómodos alternando con los dias de tacones.
“Es clínicamente importante que las mujeres que usan tacones hagan ejercicios de fortalecimiento de tobillo regularmente“.
Efectos secundarios de los Tacones
El daño causado por los tacones altos no sólo es muscular, también puede ser estético. Los pies de algunas celebridades a menudo pueden terminar pareciendo menos glamurosos después de años de utilizar tacones.
Un tacón de siete centímetros, descarga adelante el 75% del peso, y uno de 10 centímetros o más, puede poner más del 90% del peso del cuerpo en los dedos y los metatarsianos, con complicaciones esqueléticas.
“La triada perfecta: el peso adelante, el zapato angosto y músculos más cortos. Son la perfecta conjunción de acciones para producir juanetes, dedos en martillo, callosidades bajo el pie y dolor al tratar de apoyar en lo plano”, dice María Fernanda Pérez, fisioterapeuta del Hospital San Ignacio.
El uso de tacones, además conlleva más efectos perjudiciales tales como el aumento de la curva lumbar con acortamiento de los músculos de esa región, se tensionan y ante esfuerzos leves de estiramientos, pueden causar espasmos severos, que repercuten en los discos entre las vértebras e incluso en las raíces nerviosas.
Las estadísticas demuestran que las mujeres padecen hasta cuatro veces más problemas en los pies que los hombres y esto es debido a la utilización de tacones altos. Se ha demostrado, además, que cuanto más altos y estrechos sean estos, más consecuencias negativas tendrán para los pies de las mujeres.
Estudios Cientificos.
Según confirma la podóloga estadounidense Katheryn Moss “los tacones demasiado altos afectan al talón de Aquiles y ejercen una presión en la parte delantera del pie que resulta excesiva, provocando que dicha parte del pie tenga que soportar todo el peso y termine provocando el desplazamiento del cuerpo hacia delante y dolor en las extremidades”.
Y para rematar con la guinda del pastel, queremos que sepas que cuando se utiliza un tacón demasiado alto en un zapato estrecho, surge inestabilidad al caminar, la postura del cuerpo de modifica y la columna vertebral se ve directamente afectada.
¿Conclusión? Ahora ya sabes por qué razón cuando llegas a casa, lo primero que haces, antes de soltar el bolso y el abrigo es… quitarte los zapatos de tacón y poner los pies en alto.
Espero que esta información te ayude a saber convivir con los tacones, manejando más información.